Estanques y lagos artificiales
Artículo revisado por el Comité
Los ríos, lagos, embalses, pantanos y otros humedales constituyen lo que se denomina "aguas continentales". Tradicionalmente, los recursos piscícolas de ríos y lagos se han utilizado.
Estanque
Un estanque sano y equilibrado no difiere mucho de un lago natural, realizamos prácticamente el mismo estudio, pero contando que no se destinará a uso de baño y que contendrá una fauna acuática variada. Por lo que variará el sistema de filtración, variables químicas del agua y ciertas normativas.
Nuestro fin es ofrecer estanques a un nivel profesional, libres de los problemas comunes del pasado (aguas verdes, depósitos de materia orgánica en el fondo etc.) Infinidad de mediciones y adicciones de todo tipo de reguladores (PH, Oxigeno, anti algas, etc.) Lo que realizamos una vez estudiados todos los puntos a tener en cuenta, son biotipos que vayan evolucionando hacia su autogestión.
Con ello pretendemos librar al usuario de un mantenimiento interminable, teniendo más tiempo para disfrutar de su estanque.
Dicho biotipo constará de una cascada o riachuelo que imprimirá relajación y frescura y una acumulación de agua donde convivirán toda la fauna y flora propia de un medio acuático (planta terrestre y acuática, peces, anfibios, libélulas etc.)
Todos los sistemas de filtraje son respetuosos con el medio ambiente e intentan reproducir la misma filtración que se produce en los ríos y lagos que se pueden encontrar en la naturaleza Una de las tendencias actuales de la Arquitectura del Paisaje es el tener en dentro de la zona habitacional (Nivel medio alto – superior) uno o varios Lagos Artificiales, mismo que pueden estar de forma natural, aprovechando las irregularidades del terreno o mediante el uso de fuerza de trabajo humano.
Lagos Artificiales Los trabajos básicos, previo estudio técnico, para la construcción del Lago Artificial son:
- Excavar
- Compactar
- Impermeabilizar
Emplazamiento
El conocimiento del terreno donde se ha de ubicar el embalse, no solamente habrá de referirse a sus características físicas de forma (relieve) y de estructura (geología) sino también a los usos que en el se desarrollan, debiendo detallarse las construcciones fijas preexistentes así como la distribución de la propiedad.
Es necesario considerar los numerosos elementos que influirán en la construcción y en el costo de la obra, de todos ellos se pueden destacar como principales:
1- Accesibilidad.
2- Proximidad entre la zona de alimentación y la zona de consumo de agua.
3- Precio del terreno donde se instalará el depósito.
4- Calidad del terreno, que permita una compactación correcta y económica
5- Datos climatológicos:
Orientación. Dirección y fuerza de los vientos dominantes (importancia del oleaje) Insolación. Régimen de lluvias: (riesgos de erosión en taludes). Temperaturas extremas.
6 – Riesgos sísmicos, aunque estos sean mínimos influenciarán sobre las pendientes del talud y por lo tanto sobre el costo de la obra.
Entorno
Se deberá tener en cuenta su área de influencia, el conocimiento de la hidrología superficial de la zona, sus condiciones climáticas, su sismicidad y sus valores medioambientales y ecológicos. Todos ellos se concretarán en los siguientes apartados:
- Conocimiento del terreno: estudio de los mapas geológicos y de las capas superficiales disponibles que conciernan al lugar explorado o a lugares parecidos.
- Características mecánicas del terreno: se extraerán muestras representativas hasta el fondo probable de la excavación. Las características mecánicas son indispensables para definir la geometría del depósito, calcular asentamientos previsibles bajo la presión de la columna de agua, estudiar las pendientes de los taludes y los volúmenes de tierra.
- Investigación sobre los riesgos de fallas y posibles desprendimientos de zonas inestables: con un conocimiento previo de la zona, bastará para determinar si debe hacerse o no un estudio geotécnico previo.
- Investigación sobre los regímenes de agua: se deberá realizar un estudio de aportaciones y demandas de agua, donde habrá que tener en cuenta:
- Aportaciones y su régimen.
- Demandas: que podrán ser para usos no agrícolas (poblaciones, granjas, etc.); para usos agrícolas, donde se deberán conocer los siguientes datos, superficie a regar.
- Evaporación en la superficie del embalse